En este post os hablaba del terrible, agotador e interminable momento de no irse a la cama y de cómo lo estábamos sufriendo por aquellos días. En este otro post, escribí una pequeña idea para intentar solucionarlo. Pues bien, hoy traigo otro mini truco para que no nos den las mil todas las noches.
El domingo pasado, Mimaridín aterrizó en casa después de un viaje MUY largo y trajo unas pegatinas fluorescentes con estrellas y planetas para pegar en el techo de la habitación. En un momento de esplendor de Mitercero escuché decirle a Micuarto que cada día que se porte bien, pegaríamos una. Y como me pareció una idea estupenda, dicho y hecho. Yo sólo concreté un poco el objetivo diciéndole que era a la hora de irse a dormir cuando se tenía que portar especialmente bien si quería ganar la pegatina.
La idea es muy sencilla, la primera noche pondremos una pegatina en el techo como premio a algo que haya hecho bien antes de irse a dormir (dejó las zapatillas ordenadas, se cepilló bien los dientes, no se manchó en la cena,...lo que veas), después le diremos que puede ganar otra si se queda quietecito y no se levanta de la cama. Al día siguiente, si lo ha hecho medianamente bien, le diremos que estamos muy orgullosos de él y que ha ganado la segunda pegatina que colocaremos a lo largo del día, preferiblemente antes de acostarnos. De esta manera, reforzaremos el esfuerzo del niño por quedarse en la cama no sólo mientras coloquemos la pegatina, sino también cuando vea su reflejo, ya que éste puede animarle a no levantarse puesto que recordará que eso está ahí gracias a su buen comportamiento.
Feliz comienzo de semana!!
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